Xin chào | Un regalo del Comandante en Filven

La barca de nuestros sueños inconclusos, así tituló Chávez nuestra pintura a dos manos.

Rosinés Chávez R.

18/07/2025.- Para Rosinés Chávez Rodríguez, su libro, adornado de pétalos de rosas rojas, a casa llena en la XXI Filven, fue un regalo del Comandante, porque fue él quien la inspiró para dar ese paso de publicar un libro en un evento tan importante que durante 10 días iluminó nuestra ciudad capital y que prontamente transitará caminos por los estados de Venezuela, incluyendo el Esequibo.

“Para mí, son escritos, son cartas, un poco en respuesta a todos los escritos y cartas y mensajes en fotos, en libros, que papá nos escribía y que nos acompañan. Así lo dijo Rosinés, la hija del Comandante, frente a un público que la aplaudió, porque esa euforia también era para Chávez, con motivo de su natalicio este 28 de julio.

Relató, además, la joven presidenta de Inparques, que en un principio pensó en publicar en 2024 un libro de 70 poemas por los 70 años del Comandante: “En principio iba a escoger todas las cosas que ya había escrito para publicarlo, pero preferí publicarlo todo. Así comencé esta aventura de creación, diseño, indecisión y de mucho apoyo. Así nació este sueño de La barca de los sueños inconclusos«.

Sobre la portada del libro, explicó Rosinés, que es uno de los cuadros inconclusos que ella dibujó desde pequeña junto al Comandante. Sobre el diseño interior de la obra, fue de su propia cosecha, apoyada con ilustraciones a base de girasoles; “la mayoría de los cuadros están como están, sin terminar, y yo me decía, ¿será terminado? El cuadro vale lo que vale, porque está así, porque no tiene ni una gota más de pintura. Fue así como lo dejamos en esta foto, que fue un regalo de un cumpleaños. Él me escribió La barca de nuestros sueños inconclusos, de ahí sale el nombre del libro».

Ese hermoso libro de la hija de Chávez recibió el beneplácito de cientos de asistentes a la Filven XXI, según la lista de las obras más vendidas, que lideró Un tren viaja al cielo de la medianoche, autoría del fiscal general de la Nación, Tarek William Saab, seguido por Trilogía del desamor, de Miguel Ángel Pérez Pirela,

Aquel cumpleaños en Hanói

La ciudad de Hanói, la antigua Thăng Long (dragón en ascenso), aguardaba el cumplimiento de uno de los mayores deseos del comandante Hugo Rafael Chávez Frías, como fue el estrechar manos con el Soldado mayor de Vietnam, como llaman las y los vietnamitas al general Võ Nguyên Giáp, el héroe de la emblemática batalla de Điện Biên Phủ, que rompió las cadenas del yugo francés en Indochina de 1954, hace ya 71 años.

Y es que el comandante Chávez volaba rumbo a la República Popular de China, pero antes tocaría tierra en Nội Bài, el mayor aeropuerto de la capital vietnamita, el 31 de julio de 2006, para sorpresa de los habitantes de la tierra heroica de Hồ Chí Minh. Hacía apenas cuatro días que Chávez había cumplido 52 años de haber nacido en Sabaneta de Barinas. Ahora estaba en el país de humildes trabajadores de la tierra que, a base de perseverancia, pero sin reposo, logró batir en un siglo a tres potencias militares: a Francia, a Japón y finalmente a la fuerza militar más poderosa para entonces, el ejército de Estados Unidos, el imperio mayor.

Al día siguiente, el martes primero de agosto, en medio de calles y avenidas, banderolas rojas por doquier ambientaban la fecha, debido a la cercanía de la celebración de la Revolución de Agosto, que condujo al nacimiento de la República Democrática de Vietnam, mientras la caravana de Chávez serpenteaba rumbo a la casa número 30 de la calle Hoàng Diệu, donde habitaba para entonces el general Giáp. Se trata de una zona colmada de historia patria, dominada por la avenida Điện Biên Phủ, el Museo de la Historia de la Guerra, a pocas cuadras el mausoleo donde reposan los restos de Hồ Chí Minh. Frente al Museo de la Historia de la Guerra, una gigantesca estatua de Lenin parece completar el cuadro simbólico de una patria liberada por «un pueblo unido, armado de conciencia”, como dijera el Tío Hồ después del triunfo de Điện Biên (1954).

Un pequeño bosque como entrada, un pozo adornado de dibujos móviles pincelados por peces de variados colores. Por allí pasó Chávez a paso firme, cual marcha de correcto saludo ante el mayor general.

El coronel Trần Hồng, manejando con destreza su cámara 35 mm, había congelado en el acetato para siempre el histórico encuentro ante un enjambre de comunicadores, frente a los cuales el comandante Presidente obsequió, al ya anciano héroe de mil batallas, una réplica de la espada del Libertador Simón Bolívar, a la vez que revelara a los periodistas haber estudiado profundamente el pensamiento militar de Giáp, y «que uno de sus sueños habría sido servir bajo su mando, como un simple soldado, en la lucha por la conquista de la libertad y el socialismo”.

Trần Hồng había captado con su cámara Zenit un verdadero encuentro de hermandad revolucionaria, pueblo a pueblo, como sucedió también un primero de agosto, pero de 1963, hace ya 62 años, igualmente en Hanói, entre el Tío Ho y una delegación de guerrilleros venezolanos, que estuvo encabezada por el capitán de fragata, Pedro Medina Silva, comandante para entonces de la Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN).

Por Ángel Bastidas G

Fuente de consulta:

XXII Feria del libro de Venezuela (Filven), 2025.

Comuna Amantes de la Poesía y el Canto (2017). Por aquí pasó Chávez. Ed. Thế Giới.

Bastidas G. Ángel (2017). Xin chào. Ed. Thế Giới.