(Síntesis directa y explosiva del artículo de The Guardian)
El Guardian reveló que el Departamento de Justicia de Trump está reactivando una teoría conspirativa falsa:
👉 que Venezuela “robó” las elecciones de 2020 en Estados Unidos.
Aunque esa acusación fue desmentida en tribunales, y Fox News, Newsmax y OAN pagaron millones en demandas por difamación, Trump ahora la está usando como arma política y militar.
🔻 ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?
Investigadores federales han estado entrevistando a personajes que impulsan la teoría de que el gobierno venezolano —Maduro, y hasta Chávez muerto— manipuló máquinas de votación en EE. UU.
Los contactos se están produciendo en:
- Puerto Rico, con el fiscal federal W. Stephen Muldrow
- Tampa, con una fuerza especial que investiga narcotráfico venezolano
Ambos grupos, según fuentes, están recibiendo documentos, testigos y alegatos sin base real.
🔻 ¿POR QUÉ IMPORTA?
Porque esta supuesta investigación permitiría a Trump:
✔️ Reescribir la historia de su derrota electoral
✔️ Presentar a Venezuela como amenaza directa a la democracia estadounidense
✔️ Justificar una intervención militar en Venezuela
El artículo subraya que esta narrativa se está reactivando en medio de un incremento militar en el Caribe y un discurso más agresivo contra Maduro.
🔻 ¿QUIÉNES MUEVEN ESTA TEORÍA?
Dos personajes clave:
🟥 Gary Berntsen
Exagente de la CIA, fanático de Trump y defensor de invadir Venezuela.
Promueve la idea de que Caracas manipuló elecciones en EE. UU. y en otros países.
🟥 Martin Rodil
Venezolano en Washington, vinculado a agencias estadounidenses.
Fue investigado en España por extorsión, pero lo niega.
Ambos han entregado “testigos” y “pruebas” que fueron desestimadas hace años.
🔻 ¿QUÉ DICEN FUENTES INTERNAS?
Que el fiscal Muldrow ha sido muy receptivo a estas teorías.
Y que la investigación podría producir acusaciones en las próximas semanas, según Berntsen.
🔻 ¿QUÉ SIGNIFICA TODO ESTO?
Que el gobierno de Trump está:
✔️ Reviviendo teorías falsas
✔️ Usándolas políticamente
✔️ Y posiblemente preparando el terreno para una agresión contra Venezuela
Mientras tanto, se vuelve a utilizar la narrativa de “elecciones robadas” para justificar decisiones políticas extremas.