
Por: Felipe Andrés Pérez Cabrera.
Voy a comentar sobre los lamentables hechos ocurridos. Un grupo de soldados se internan en zona de Guaviare donde se encontraba un frente guerrillero de las discidencias de Calarca, como ellos dicen en el comunicado había sucedido lo mismo en otra zona, donde murió un comandante guerrillero, mientras intentaban replegarse. Para los que no conocen el tema militar, el repliegue por contradictorio que parezca, en ciertas circunstancias puede ser más peligroso que mantener las posiciones, ya que en el repliegue se pueden perder defensas fortificadas. En esta situación este frente decidió no replegarse ante el ataque y mantener su posición defensiva, varias cargas de tropas del ejército fueron lanzadas para tomarse las posiciones insurgentes, igualmente para quienes no conocen, la ofensiva es más peligrosa y generalmente da más bajas que la defensa. Los soldados fueron usados como carne de cañón para atacar este frente guerrillero, me pregunto ¿todo se trató de una confusión? ¿No sabían los comandantes a cargo que era un grupo de Calarcá?. Nuevamente para quienes no conocen este tipo de situaciones ocurren a menudo, se llama fuego amigo, a veces se da entre mismos combatientes de una misma guarnición, ahora es más común, entre soldados de un mismo ejército pero de distinta comandancia, o entre distintos organismos militares de un mismo Estado, etc.
Ojalá todo se haya tratado de una confusión, conocido como fuego amigo. De lo contrario entrarían otras teorías, donde están buscando escalar la confrontación. Es decir podría estar de nuevo la mano negra, que siempre a hecho se replique la violencia en nuestro país, y es que hay gente que sé beneficia con nuestra sangre; quien es la mano negra, por una parte las industrias militares, en especial de USA, Israel y Europa, de quienes pertenecen las armas y todo equipo militar de un bando y otro. También podemos decir el imperialismo se fortalece con el debilitamiento del proyecto original de Simón Bolívar, que aunque muchos políticos quieren olvidarlo, su solo nombre es un recordatorio «República de Colombia». Pero el imperialismo igualmente tiene sus lacayos que venden seguridad, y buscan con la sangre de los Colombianos llegar a la jefatura de Gobierno y del Estado.
Podría ser que quieren incendiar a Colombia, pero esta vez debemos ser más inteligentes, para lograr cambiar la historia de Colombia, que seamos ese gran proyecto que un día nos encomendaron nuestros ancestros, destinado en contruir la República más grande del mundo, entre toda Latinoamérica y el Caribe, la República de Colombia a pesar del intento por destruirla aún sobrevive y goza de buena salud. Debemos seguir transitando este camino de la justicia social e igualdad.
Pd: en este enlace de abajo, video de entrega de soldados prisioneros de guerra.